No pretendo que este artículo sea un análisis técnico en el que se tengan en cuenta las vicisitudes más intrínsecamente literarias de los tres libros que forman la trilogía Millennium. Ni es mi intención, ni creo que sea capaz de hacerlo. Quizás (casi seguro) porque reconozco que no he leído lo suficiente en mi vida como para comparar o hacer un estudio profundo y cualitativo de estas novelas.
Para algunos los tres libros del fallecido Stieg Larsson serán poco interesantes, otros afirmarán que es una lectura fácil y sencilla con una trama poco rebuscada. Los habrá que prefieran libros más profundos y, por supuesto, muchos tendrán capacidad suficiente para hacer una crítica mucho más profesional que la que puedo hacer yo. Para mí, estos libros sólo son los que más me han enganchado en mi vida. Tres novelas de las que me mantenían despierto a las dos de la mañana cuando al día siguiente tenía que madrugar. Ni más ni menos.
En particular las dos primeras: Los hombres que no amaban a las mujeres y La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina, me parecen excelentes. Como la mejor novela negra de siempre a la que se han sumado, con absoluta naturalidad, toques de modernidad. Tienen de todo: investigación, violencia, periodismo, sexo, erotismo, morbo, mentiras.
Larsson sabe conducirte por los caminos que a él más le gustan. Te lleva a donde quiere, maneja tu mente como si de una marioneta se tratara para que saltes como un resorte con la resolución final. Define perfectamente los lugares por los que discurre la historia. Eres capaz de imaginar cómo es ese pueblo al que se va Mikael Blomkvist para investigar, la forma de la redacción de la revista e incluso las caras de los personajes. Eso sí, excepto la del protagonista. No podía imaginarme otra faz que no fuera la de Daniel Craig, y eso que no vi las películas hasta que terminé la lectura.
Cada noche me identificaba al máximo con unos personajes que hacían mías sus preocupaciones. Lisbeth, Mikael, Erika, se convirtieron, más que en protagonistas de unas páginas, en amigos. En compañeros de piso que diariamente me hacían vibrar, sufrir o reír a través de sus rebuscadas vivencias.
Como he dicho antes, especialmente los dos primeros libros alcanzan, en mi poco profesional opinión, un nivel literario excelso. En el último: La reina en el palacio de las corrientes de aire, sin ser malo (ni mucho menos), creo que Larsson se recrea demasiado en datos, nombres, siglas y personajes que realmente no tienen una función básica en la resolución final. Perdonable al máximo después de hacernos disfrutar en las otras dos
Una pena que falleciera joven. Si no, a buen seguro que estaríamos hablando de uno de los mejores escritores del momento. Tendría quizás en mi mente más partes de Millennium, o historias protagonizadas por otra Lisbeth y otro Mikael, pero igual de interesantes y adictivas.
28/02/13 at 18:19
Hola Oscar, Bueno el artculo. Equilibrado y honesto.Como no tendremos tiempo de leer ni la millonesima parte de lo que nos gustara, hay que seleccionar. Por principio y salvo excepciones, descarto los Best Sellers, pero despus de leer tu comentario y la vida y trayectoria del fulano, tendr que leerme por lo menos el primero que, segn tu, sera el mas interesante.Gracias.Abrazo.Jos A. Date: Mon, 25 Feb 2013 18:18:40 +0000 To: jagh360@hotmail.com
2/03/13 at 14:34
no no es el mas interesante .Los tres son interesantes,cuando leas el primero desearas leer el segundo y despues estaras ansioso haste leer el tercero …te lo igo yo, que me los leia casi del tiron, y como aun no se habian publicado los demas estaba esperando ansiosamente me paso igual con las peliculas
2/03/13 at 14:36
https://www.facebook.com/pages/milenium-trologia/214273318596535
17/09/14 at 19:30
[…] a cambiar las tornas. Permitirme esa licencia. Si el escritor sueco, creador de la renombrada saga Millenium, siguiera vivo, sería “el César Pérez Gellida sueco”. Hace no mucho me deshacía en elogios […]